domingo, 21 de septiembre de 2008

Clase global, desastre local

Las opiniones que voy a vertir están basadas en la experiencia que tuve la noche de Sept 10. Nunca antes había participado en una clase "a distancia".
No le veo ningún beneficio a esa forma de intercambio si con él se pretende sustituir una clase regular. Varios son los motivos en que baso mi opinión, pero solo algunos de ellos paso a mencionar (sin detenerme a argumentar en detalle el pro y el contra de cada uno).
Primero: porque de las dos horas y media de clase cuarenta y cinco minutos largos se fueron en establecer una comunicación estable entre todos los participantes (aunque lo que escuché decir a Carla en la clase del 17 me hace dudar de que haya habido un momento en que todos estuviésemos realmente comunicados). Pero no fue todo: una vez establecida la conexión, sufrió interrupciones que llegaron a ser irritantes por su frecuencia.
Segundo: las preguntas escritas se desplazan unas a otras en una secuencia sin ilación; se superponen de manera que, mientras responde la profesora la que le presentaron hace medio minuto (¡medio minuto, con suerte!), ya han entrado tres o cuatro nuevas preguntas en el campo de visión del alumno (el resultado es obvio: la atención se disipa, el marco de atención se vuelve confuso o no firme, y el ejemplo en que pudo ser fijada la lección quedo difuminado -si es que no lo arrastra la próxima respuesta... o pregunta... ¿disculpen, pero, de qué estábamos hablando?) You get my drift.
Tercero: solo durante unos diez minutos (de dos horas y media) conseguimos un resultado beneficioso (trabajamos sobre los errores usuales con los gerundios); en esa oportunidad tuvimos la ayuda de una hoja impresa, un referente estable, lo cual explica el cambio. Lo que acabo de escribir me da oportunidad para indicar el único posible beneficio para una sesión de SPAN 505 mediante el sistema "a distancia": con una hoja en nuestras manos, y la profesora limitándose a un 'Sí, correcto', 'No, incorrecto'. (Y, para mí, es un desgaste enorme de tiempo y material para tan escaso y elemental resultado.)
Quiero agregar lo siguiente: para una clase de estilística la presencia del profesor en el aula no puede ser sustituido de ningún modo. La autoridad de su presencia unifica los intereses y puntualiza las respuestas (y éstas, casi siempre aclaran las dudas de otros estudiantes, no solo de quien presentó la pregunta). Es imposible que pueda la profesora, a través de un enlace como fue el de la noche del 10, adaptar su respuesta con idoneidad.
Además, profesora, a través de los audífonos, uno se pierde el encanto de su acento, tan gratamente castizo.
KYOT

5 comentarios:

Carol dijo...

Bueno yo estoy muy de acuerdo con que las clases por internet no son beneficiosas. En mi opinión, creo que las clases por internet son muy pausadas, ya que hay que esperar que todos se conecten, que esté bien el audio, asegurarnos de que podemos ver bien a la maestra y por ultimo, cerciorarnos que estemos conectados. Además creo que no podemos saber cuando es nuestro turno para preguntar o responder, como en las clases presenciales en las cuales, cuando uno habla espera que esa persona termine de hablar y que la profesora le ceda el permiso para hablar o preguntar algo. Y comparto la idea contigo de que se pierde el hilo. Tomar clases por internet da opción a que ocurran malentendidos, ya que como los alumnos esciben simultáneamente, se van llenando de información los estudiantes y la maestra. Mientras uno esta leyendo algo que alguien ha escrito, otra persona ya escribió algo más y tenemos nueva información, y en seguida otro alumno escribe otro pedazo de información y así sucesivamente, se pierde el hilo y uno queda totalmente confundido y frustrado.
Pienso también que la clase por internet es una pérdida de tiempoya que la conexión no siempre es buena, puede ocurrir por ejemplo, que se corte el internet de la maestra, o se vaya su audio o parte visual y hay que esperar a que la maestra se conecte nuevamente. Otro inconveniente es que alguien no llegue a leer información importante por ejemplo: si alguien no leyó algo rápidamente tiene que volver atrás a leer la información para entender bien la charla y el estudiante se retrasa. Por las razones ya mencionadas veo que no sería una buena idea que se tomen las clases de SPAN 505 por internet.
Atte.
Carol Valdez

Miguel S. González dijo...

Creo que sería buena idea que Esperanza nos comentase, en el blog o en clase, como se desarrolla una clase normal por Internet y en condiciones técnicas normales. Estoy seguro de que no son ni tan irritantes ni tan estresantes.

Para muchos era la primera vez, y eso siempre influye. Mucho del tiempo que el estudiante pasa delante de su computadora no tiene por que ser en forma de conferencia sincrónica, suele haber periodos de dos o tres días para hacer las entradas; incluso en los trabajos en grupo en muchas ocasiones no hay simultaneidad en la comunicación.

De todas formas yo también tengo un par de cosas que no me convencen de la tecnología y las clases por Internet, pero de momento no las mencionaré.

Lo que sí que te concedo es el argumento de los acentos, nada como escucharlos de viva voz, con la expresión de una cara delante que a veces dice más que las palabras.

Yo se que en el fondo el mundo de Internet y las computadoras te da algunas satisfacciones. Yo te he visto sonreir delante de la computadora cuando la has vencido y has conseguido lo que querías. Además, es un placer leerte...en Internet.

Un saludo

Carla dijo...

Por ahi tiene razon Miguel, seria buena idea que tuvieramos una clase en el laboratorio y probemos. Yo ya tuves clases con otra institución durante meses on line y la verdad es que es distinto pero no malo, es otro tipo de comunicación.

eRoman dijo...

Enrique:

El ejercicio no consistía en poner una entrada con tus opiniones sobre la clase online sino en publicar sendos comentarios sobre los artículos que yo seleccioné al efecto.

Saludos,
La profesora

mdimeo dijo...

Existen algunos beneficios con una clase en línea que ayudan a tres tipos de persona. Primero, para los que tienen dificultades al escribir, en segundo lugar para poner énfasis sobre el escuchar y leer, y también las personas que están muy ocupadas o viven lejos de la escuela.

Cuando existen personas que hablan mejor que escriben, es importante incorporar el escrito en la clase. Por una clase en línea, es mucho más fácil saber la calidad de lengua escrita de los estudiantes cuando tienen que escribir tan rápido como hablan. Lo que escriben es muy directo y todos pueden ver y comentar sobre las preguntas y comentarios de cada estudiante (si escriben rápidamente).

Si es solo el/la profesor(a) que habla y dirige la clase mientras que los estudiantes escuchan y escriben, ellos tienen que estar atentos para que puedan entender lo que el/ella dice o escribe de cualquier tema.

La cosa que entiendo más como propósito para organizar una clase en línea es la razón de conveniencia. Hoy en día, los estudiantes y los profesores no son solo estudiantes y profesores. Fuera de la clase, todos tienen que trabajar, y pasan tiempo con sus familias, lo que se vuelve en mucho más difícil a causa de la distancia. Muchas personas no viven cerca de su propia universidad, y la idea de encender su computadora así que no tienen que manejar más cuando ya están cansados es muy buena.

A causa de los cambios tecnológicos y de los horarios de las personas inscritas en las clases, una clase en línea les conviene mucho. Es importante disfrutar de esta opción pero al mismo tiempo no preferir una clase en línea en vez de una tradicional.